El uso de EPP ajustado es esencial para prevenir la exposición a materias dispersas en el aire, incluido el virus COVID-19. La pandemia actual ha aumentado la presión sobre los sistemas de atención médica de todo el mundo, lo que ha llevado a los profesionales médicos a utilizar EPP de alta calidad durante períodos prolongados, lo que ha provocado lesiones cutáneas inducidas por dispositivos. Este estudio se centra en mejorar computacionalmente la interacción entre la piel y el EPP para reducir la probabilidad de malestar y daño tisular. Se desarrolla un modelo de elementos finitos para simular el movimiento del EPP contra la cara durante las tareas del día a día. Debido a los limitados datos disponibles sobre las características de la piel y cómo estas varían interpersonalmente entre sexos, razas y edades, el objetivo principal de este estudio fue establecer los efectos y las tendencias que tienen las modificaciones de la máscara en la distribución resultante de la densidad de energía de la deformación subsuperficial en la piel. Estas modificaciones incluyen las propiedades materiales, geométricas e interfaciales. En general, los resultados muestran que las lesiones cutáneas pueden reducirse mediante el uso de materiales de máscara más suaves, mientras que la fricción contra la piel debe minimizarse, p. Ej. mediante el uso de micro-texturas, control de la humedad y cremas tópicas. Además, se debe maximizar el área de contacto entre la máscara y la piel, mientras que se debe evitar el uso de materiales blandos con comportamiento incompresible (por ejemplo, muchos elastómeros).
REFERENCIAS:
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