En marzo de 2020, la demanda de pruebas de COVID-19 y la escasa disponibilidad de equipo de protección personal (PPE) fueron preocupaciones para Mass General Brigham (MGB) en Boston. En respuesta, una unidad de innovación hospitalaria contrató a médicos, diseñadores e ingenieros de primera línea para diseñar una solución para las pruebas de pacientes ambulatorios para mejorar el rendimiento y conservar el PPE. El resultado fue una cabina de protección personal de presión positiva, filtrada por aire y partículas de alta eficiencia con 6 puertos ergonómicos para guantes llamados Hexapod. La eficiencia se obtuvo mediante el uso de 3 compartimentos para pacientes, 1 de los cuales era accesible para sillas de ruedas, para cada individuo que obtenía muestras de hisopos. El modelo final estuvo en uso en 28 días . La formación de nuevos usuarios normalmente requería menos de 30 minutos. Evaluamos la utilidad de los hexápodos para las pruebas de COVID-19. Figure 1. Hexapod Personal Protection Booth.
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